miércoles, 19 de enero de 2011

De mayor quiero ser normal

Creo que la pregunta que más se hará un mentiroso es si los demás mienten tanto y tan bien como él.
Es que es una continua tensión. Yo no suelo mentir pero tengo ciertas historias falsas que sigo prolongando en el tiempo. Por ejemplo esa de que perdí la virginidad a los 15. Mentira cochina, cochinísima. A esa edad me lié por primera vez con una tia, pero solo fueron unos besos y muy mal dados. Por aquel entonces yo era muy muy tonta, supongo que como cualquier chica de 15 años. Ella era mayor que yo, cosa que a mi me encantaba, pero aún no sabia que eso era una gran pega para que yo le pudiera gustar. De hecho, ya por aquel entonces me inventé la historia de que había tenido novia para no parecer tan pardilla. Eso me dejó en peor lugar.

En realidad la perdí nada mas y nada menos que el día de mi dieciocho cumpleaños y con un tío. Si ese tio se enterase de eso, además de no sorprenderle me lo estaría repitiendo a diario. Por pura satisfacción feminista, ese secreto se irá conmigo a la tumba. Por feminista y por mentirosilla.

P.D: El día que tenga una hija tendré que cambiar la historia o seré la madre mas enrollada del mundo.

lunes, 17 de enero de 2011

Porqué no debería nadie hacerse un blog

Fácil. Para no hacer algo siempre existe alguna razón, pero como eso es muy simple, voy a hacer una lista.

- Almacenar datos en Internet es totalmente inseguro sino se precisa de un almacenamiento privado. Aún así existen muchas posibilidades de que alguien pudiera adueñarse de esos datos, siempre que sean de interés.
- Si escribes sobre tu vida está claro que estás ofreciendo datos preciados a cualquier individuo. Amistosos, bondadosos, psicópatas, violadores, pederastas, políticos, amigos, vecinos, familiares, parejas, amantes...
- Si no escribes sobre tu vida pero finges que si que lo haces probablemente tengas mucho mas éxito pero te contradigas y recibas muy malas críticas.
- Si solo das tu opinión sobre temas actuales acabarás repitiéndote. Hoy en día es complicado llevar ese tipo de blog y tener lectores habituales.

Y ya está. A quedado claro que no son suficientes para mí. De hecho, lo que pienso hacer es mezclar todo lo anterior, echarle una pizca de pimienta negra y meterlo en un bocata.

Mi nombre es T. y estoy totalmente encantada de poder escribiros, pero estaré mas encantada si expresáis vuestra opinión.